jueves, 27 de noviembre de 2008

Hay locuras que imprimen dulces quemaduras...

O como dije digo, digo diego.
O sí, soy una loca irremediable

Aquí seguimos yo y mis vértigos, el mundo girando como un globo. Me haría hasta gracia si no fuera por las náuseas. Pero como a todo le intento buscar el lado positivo, mira por donde la dieta me está funcionando estos días de coña.

Siguiendo los desvaríos del post anterior, o más que seguirlos añadiendo os digo:

¡Que jodidamente bueno es querer a alguien! Ojo, si te quieren también a ti es ya la repanocha pero tan sólo el mero hecho de que una persona te conmueva, te llegue lo suficiente para quererla…..es alucinante. Perdonad lo exabruptos, pero a veces son un recurso muy bueno para darle el grado concreto a lo que quiero expresar.

Y pensar que a la mayoría de la gente ni siquiera les damos - les doy - la oportunidad de acercarse lo suficiente como para llegar a quererlos. Soy – somos – unos pavos. Idealizamos a los demás y cuando no cumplen lo que esperamos nos desanimamos y los desechamos – los desecho – de nuestras posibilidades de amor. Cuando lo único que hace falta es escuchar –escucharnos más – para quererlos. Y también ampliar ¿por qué no? nuestras posibilidades para amar.

Venga! la perfección no existe, es sólo un inmenso y muy gilipollas handicap de ideales que nos hemos autoimpuesto para echarle a algo la culpa de no ser felices.

¿Y por qué el amor tiene que ser una peli de Meg Ryan?
¿Y si el amor de tu vida está escondido bajo cuatro capas de “yo no”? ¿O bajo un físico extraño?
¿Y si el amor de tu vida no tiene un final feliz de campanas de boda y niños correteando?
¿Y si por querer encontrar el amor de tu vida deshechas – deshecho- personas increíbles a las que querer de mil y un formas distintas? Amigos, cómplices, confidentes, compañeros, colegas, amantes.

Ea que no, que no me hace falta que ya nadie me enamore. Lo tengo decidido, os váis a cagar. Me pienso enamorar yo solita. A fín de cuentas casi he tardado 40 años en darme cuenta de que el amor es algo que no te dan, sino que lo lleva uno puesto de serie. Y yo otra cosa no , pero …

Amor tengo por un tubo.





LOCURAS
Silvio Rodríguez (Cuba)


Hay locuras para la esperanza,
hay locuras también del dolor.
Y hay locuras de allá,
donde el cuerdo no alcanza,
locuras de otro color.

Hay locuras que son poesía,
hay locuras de un raro lugar.
Hay locuras sin nombre,
sin fecha, sin cura,
que no vale la pena curar.

Hay locuras que son
como brazos de mal:
te sorprenden, te arrastran,
te pierden y ya.

Hay locuras de ley,
pero no de buscar.
Hay locuras que son la locura:
personales locuras de dos.

Hay locuras que imprimen
dulces quemaduras,
locuras de Diosa y de Dios.
Hay locuras que hicieron el día,
hay locuras que están por venir.

Hay locuras tan vivas,
tan sanas, tan puras,
que una de ellas será mi morir.

8 comentarios:

Raquel dijo...

A mí escuchar a Silvio me produce una regresión mental a la época de estudiante, y lo cierto es que por aquel entonces enamorarse era tan fácil...

Marguis... ¡a por ellos que son pocos y cobardes!

Besos.

Anónimo dijo...

una pena el poco tiempo que tengo... también es cierto que no tener internet en casa es otra de las razones para no escribir... hoy paso solo para decirte HOLA... y que me gusta el cambio de lugar...

trasdopenedo

Anónimo dijo...

Es que amar es la consecuencia del contacto con la gente, cuanto más contacto más amor. Pero enamorarse es algo distinto, no surge con el contacto, a veces incluso desaparece con el contacto...jajaja puñetero contacto. Quizás sea hora de dejar de echar de menos enamorarse.

Anónimo dijo...

Amy, nunca hay que dejar de enamorarse.

Enamorarse es un impulso vital, una chispa, una ilusión. Hay que enamorarse mucho y sin demasiadas razones. Hay que dejarse ir.
Enamorarse no es eso del amor romántico, cartitas y flores (que puede haber). Enamorarse es sentir un torrente de emociones correr por tus venas viendo un rostro, escuchando una voz, un instante tonto, una música, un atardecer, el sonido de las hojas o algo tan prosaico como la alarma de un reloj por la mañana. Yo recuerdo una vez que me enamoré porque me arroparon.

Enamorarse se va, siempre se va. Pero es una ilusión que no debemos perder. El enamoramiento no tiene vocación de continuidad pero nos da alas.

El Amor...el amor es otra cosa, más consciente, más profunda. Unas veces empieza con un enamoramiento, otras no.
Lo que hay que saber perfectamente es cuando es uno y cuando es otro. Y admitir y disfrutar también de uno sin el otro.

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

No está mal enamorarse, es divertido. No está mal que las tripas se te llenen de mariposas y el corazón te dé un vuelco y todas esas cosas. No está mal pero, como tú dices, el amor es otra cosa.

Nos han vendido que el amor es eso que sale en las comedias románticas y que tenemos que aspirar al chico perfecto y a la relación perfecta pero, claro,eso no existe y nos llevamos una de palos...

Abre las puertas y las ventanas, baja la calle y acércate a otros. El amor puede estar donde y en quien menos te lo esperas y te imaginas.

Besos

Zafferano dijo...

Una amiga conoció al amor de su vida cuando los dos coincidieron tirando la basura en un contenedor... Nunca se sabe, pero linda, a pesar de los vértigos, la vida es bella!

Besotes

Anónimo dijo...

Marguerite !qué lindo lo que has escrito sobre el enamoramiento!. La cuestión es que hace tanto que no me enamoro que echo de menos todas esas emociones que narras. Y al oír a mi hija hablar del chico que la trae loca me hace añorar todo ese torrente de vida que nos impulsa cuando estamos enamoradas. Cachis qué bonito es sentirse así. Yo lo diferenciaría así: cuando estás enamorada disfrutas de ti, cuando amas disfrutas del otro.

Tamaruca dijo...

Perdón por la expresión pero, qué post más cojonudo.

Besos muchos.